Los guisos clásicos son recetas perfectas para aportar calidad nutricional a nuestra dieta. Una reconfortante manera de comer sano y de disfrutar con los platos. La cocina casera es uno de los mejores tesoros que podemos conservar, así que te vamos a dar unos pequeños trucos de abuela para que tu tupper sea el que mejor huela de toda la oficina.
Pilares de un guiso tradicional
Todas las recetas tienen pasos importantes a la hora del resultado final. Y en el caso de los guisos hay cuatro partes fundamentales que hay que tener muy claras para que nuestras recetas sean un éxito: el sofrito, el caldo, la salsa y las especias. Puede que así no te hagas con una estrella Michelín pero pasarás a engrosar las listas de los cocinillas en el grupo de amigos.
El sofrito
Para muchos cocineros un buen sofrito es la base imprescindible de un buen guiso… y con razón. El sofrito es el cimiento sobre el que sustentar el resto de la receta. Los ingredientes más habituales son un básico de fondo de refrigerador: ajo, cebolla y tomate. A partir de aquí, las combinaciones con ingredientes extra son bienvenidas. ¡Deja paso a tu creatividad!
Otra de las cosas más importantes de un buen sofrito es el aceite que decidas utilizar. El sabor característico del aceite de oliva suele ser uno de los mejores aliados, aunque no el más económico, sí que el que abarca mayor número de variedades. Un aceite vegetal de diferente origen también es apto para elaborar un buen sofrito.
Dependiendo de la técnica culinaria, la temperatura del fuego y las cantidades de aceite, mantequilla o incluso grasa animal, varían. En el caso del sofrito, freiremos a fuego lento los ingredientes. Ten en cuenta además que las necesidades de cocción de cada alimento son diferentes. Fríe primero la cebolla y, a continuación, el resto de verduras.
El caldo
En el caso del caldo, hay que tener en cuenta que es la preparación en la que se van a cocinar los ingredientes, por lo que absorberán gran parte de su sabor final de esta mezcla. Ojo porque el ingrediente esencial para un buen caldo, el agua, no es igual en cada casa. Las aguas de mineralización débil son las idóneas para conservas todos los nutrientes de los alimentos que vas a utilizar.
Aprovechamos para recordar la necesidad de utilizar materia prima de calidad. No tiene por qué ser necesariamente más cara y, en la mayoría de las ocasiones, podemos adquirir frutas y verduras de gran calidad en mercados locales. De igual forma, trata de que los ingredientes sean frescos, o tu receta se resentirá.
Los caldos más utilizados para los guisos suelen ser los de verduras y los de pollo. Procura que las proporciones de los ingredientes sean equilibradas, porque no sabes para qué tipo de plato vas a utilizar el caldo más tarde y nos puede sacar de muchos apuros culinarios. Y no olvidéis que un buen caldo cuece a fuego lento, lo que no significa que esté toda la noche en la placa, como si fuera un caldero de poción mágicas. Dependiendo del ingrediente base, verduras, pollo, carne o pescado, un par de horas pueden hacer un buen caldo.
La salsa
Una buena salsa tiene que estar bien ligada y ser de textura adecuada, ni muy fina ni muy gruesa. Las salsas necesitan tiempo para cocinarse correctamente, así que, como en todo, la cocina es un lugar estupendo para cultivar la paciencia: el fuego lento es tu mejor amigo de nuevo para integrar bien todos los sabores.
Si bien es muy recurrente comprar las salsas hechas, piensa en lo reconfortante que es preparar tus propias recetas. Un plato como la pasta puede tener muchas vidas dependiendo de la salsa casera que le añadas.
Las especias
Las especias son consideradas una de las almas de la cocina. Hay infinidad de opciones para que cocines tus recetas con los sabores que más te gustan. Ten en cuenta que hay especias muy fuertes, no las utilices a lo loco, o es fácil que estropees una receta entera (o incluso que causes alguna pequeña intoxicación alimentaria, si se te va la mano con la nuez moscada). Las más utilizadas para los platos mediterráneos son: el tomillo, el laurel, el perejil, el pimentón y el comino.
Pero las especias son un mundo tan amplio como interesante, y conocerlo te va a permitir que tus platos tengan un toque diferente, ayudándote a acentuar el sabor de los alimentos principales. Los guisos, tanto de carne como vegetarianos, suelen agradecer especias más utilizadas en oriente, como el hinojo, el cilantro, el estragón o el curry. La mayoría además poseen numerosas ventajas para la digestión, así que ¡no se puede hacer un plato más completo!
Guisos creativos
Una vez que tenemos la parte más clásica bien apuntada y ya nos atrevemos con los guisos tradicionales, viene la hora de avanzar un poco más a la hora de descubrir sabores. Nosotros te damos algunas ideas pero tu imaginación es la que manda:
– Almendras: los frutos secos pueden darles un toque muy original a tus recetas. No son ajenos a platos tradicionales, como el pollo en pepitoria, pero puedes utilizarlos en muchos más platos. Ten en cuenta que tienes que picarlas bien para que se integren perfectamente.
– Jengibre: No podemos decir nada malo del jengibre, todo son propiedades, todas son positivas y deliciosas. Excepto que como se te vaya la mano puede picar de más y eclipsar el resto de sabores ¡cuidado!
– Mostaza: Otra excelente opción muy común en otras cocinas. Prueba a echársela en polvo a guisos de carne, seguro que el resultado te sorprenderá.
– Chocolate: Pocos detractores vamos a encontrar a la hora de echar chocolate a… todo. Incluso para aquellos con aversión a la pizza con piña, la mezcla de sabores que surge del chocolate y la carne, puede convertirse en tu plato estrella. Chocolate negro, eso sí, y ¡a experimentar!
Como puedes ver hacer buenos guisos clásicos no es necesariamente algo complicado. Paciencia, materia prima de calidad y un poco de tiempo para que los alimentos se cocinen es más que suficiente para ayudarte a ti y a los tuyos a llevar una dieta sana y equilibrada. Y por supuesto, amor, porque esa esencia, es el mejor sofrito que puedes añadir a un plato para que sepa diferente y delicioso. Si necesitas un empujoncito para arrancar, aquí te damos algunas ideas: atento a nuestro recetario porque vamos añadiendo nuevas ideas todas las semanas.