La técnica de hervir alimentos es una de las técnicas más básicas, pero también esconde su truco. Partimos de la base de que cocinar un alimento significa transformarlo, y la principal forma de cambiar su estado es aplicando calor. Cuando hervimos, esta transformación la conseguimos sumergiendo los alimentos en agua (o caldo). Pero aquí viene el truco, y es que hay dos formas de hacerlo, y el éxito de nuestra receta dependerá de si elegimos la correcta o no:
Tipos de técnicas para hervir alimentos
Cocer los alimentos empezando con el agua fría, y llevarlo a ebullición a fuego lento hasta que los alimentos estén tiernos o suelten todo el jugo. Esto se utiliza principalmente para hacer caldos o pescados que requieran una cocción lenta. También puedes hacerlo para cocer patatas peladas cuando quieras espesar unas lentejas o un guiso, ya que soltará la fécula.
Cocer los alimentos cuando el agua está caliente. Esto consiste en sumergir los alimentos cuando el agua ya está cociendo, y esperar el tiempo necesario hasta que se cocinen. Este tiempo se empezará a contar desde el momento en el que empiece a hervir el agua. Así es como se preparan huevos cocidos, hortalizas, algunos pescados, mariscos o garbanzos, entre otros.
Controla el tiempo a la hora de hervir
Ya sabemos la teoría, ahora coge un reloj porque toca controlar el tiempo. Y es que dejar los alimentos hirviendo en el agua sin control es un grave error, ya que pueden perder todas o casi todas sus propiedades y arruinar tu receta.
– Las verduras y hortalizas mejor al dente y con colores intensos: esto se consigue hirviéndolas pocos minutos y cortando la cocción rápidamente metiéndolas en agua fría (técnica de escaldado).
– Los pescados, dependiendo del peso y tamaño, estarán listos y jugosos en 10-20min.
– Con las carnes ocurre todo lo contrario. Un cocinado a fuego lento hará que queden mucho más tiernas. Aquí podrás sentarte a esperar unas horas.
– A las legumbres también les gusta el fuego lento, mínimo 45 minutos.
– La pasta, es lo más sencillo. Solo tendrás que seguir las instrucciones del fabricante.