Cocinar al aire libre, concretamente, a la barbacoa, siempre es un placer y no necesariamente estacional. Pero alcanzar la excelencia en el arte de la barbacoa requiere dedicación y seguir algunos consejos útiles que te harán el camino más fácil y sabroso. Compartimos contigo secretos para la barbacoa perfecta y luego ya, haz tu magia.
La práctica hace al maestro de la barbacoa
No existe la mujer o el hombre que susurra a las barbacoas si no es con dedicación, amor, práctica —mucha—y paciencia. A ver, si a lo largo del año no te haces ni un huevo frito, no esperes que tu primera barbacoa vaya a ser un éxito. Practicar es clave para cualquier técnica y aquí no es una excepción. Experimenta con diferentes tipos de alimentos, marinados… Si cuentas con accesorios adecuados, como un modelo de barbacoa con un quemador adicional, puedes dedicarte a la cocina al aire libre en toda su plenitud.
Usa buena materia prima
Y a ser posible, ya que estamos, sostenible. La carne, pescado o verdura de procedencia ecológica o con sello de calidad significa que procede de fuentes fiables y el sabor suele marcar la diferencia. Por mucho que seas un maestro del gazpacho, si tus tomates no son buenos, el resultado no va a ser bueno.
Utiliza buenas herramientas de trabajo
Primer paso: una buena barbacoa. De gas o de carbón a tu elección según circunstancias, pero valora bien esta posibilidad. No es necesario que hagas la inversión de tu vida pero, lógicamente, con una barbacoa de cierta calidad, tu trabajo va a mejorar en resultados y en tiempo invertido. Además, si la usas varios días a la semana —con una de gas es más que posible—, vas a amortizarla rápido. Hazte también con unas buenas pinzas e incluso un guante y tendrás el kit básico pero eficiente.
Aprovecha la tapa de la barbacoa
Cocinar empleando la tapa es uno de los secretos no tan populares de la barbacoa que te va a ayudar a obtener una carne más tierna y jugosa. Marca la diferencia con una parrilla al uso, entre otras cosas. Mientras se dora por un lado, el calor envolvente ayudará a desatar una serie de reacciones químicas para un acabado más profesional (y rico). Trata también de mantener una temperatura constante mientras cocinas: dominar la llama es el objetivo y, muchas veces, el secreto para los mejores resultados.
Aprovecha barbacoa, plancha y parrilla
Quien dice barbacoa también puede decir cocina al grill o incluso un buen teppanyaki. Su punto común reside en sacar todo el sabor de los alimentos que cocinas, sin más aditivos, y una parte fundamental: disfrutar de una comida saludable y con todos sus nutrientes (salvo que se te requeme la chuleta).
